La tarde del sábado 2 de diciembre, ciudadanos de Bucay y autoridades locales se congregaron en la reunión para la socialización de los informes de dos Veedurías Ciudadanas que se conformaron para vigilar por un lado, la distribución de la calidad y facturación del sistema integral de agua potable; y por el otro, el funcionamiento y mantenimiento de la planta de tratamiento y del reservorio del líquido vital. Los hallazgos de dicho mecanismo –entre ellos el que se refiere el agua que se distribuye está contaminada- motivaron a sus integrantes a plantear la conformación de un Observatorio sobre la calidad de los servicios públicos del cantón.
“No debemos conformarnos nunca, sino pelear y exigir. Por eso los invito como bucayenses a ejercer sus derechos”, expresó el veedor Gregorio Rodríguez, en su convocatoria a la población a ser parte del Observatorio. Al respecto, Walter Gómez, delegado del Consejo Participación Ciudadana y Control Social (CPCCS), señaló que desde esta entidad se dará todo el apoyo a esta nueva iniciativa. “Nuestras consejeras y consejeros han felicitado la labor de estas Veedurías y han dispuesto tomar las acciones pertinentes para que sus reclamos sean atendidos”, añadió Gómez en referencia la resolución que adoptó el Pleno CPCCS de enviar una copia de los informes de los veedores al Gobierno Autónomo Descentralizado (GAD) de Bucay, a la Defensoría del Pueblo, la Arcsa, el Ministerio de Salud Pública, la Secretaría Nacional del Agua (Senagua), la Asamblea Nacional y la Presidencia de la República para que tomen las acciones pertinentes de acuerdo con sus competencias.
Durante la exposición, Rodríguez aseguró que “la ciudadanía debe tener la seguridad de que hemos actuado con responsabilidad porque cada dato de la Veeduría no es porque nosotros creímos que fueran así, sino que nos basamos en informes que solicitamos a las entidades. Uno de ellos fue emitido por el Arcsa, que revela que una muestra tomada de este líquido en Bucay tenía “460 coliformes fecales, cuando lo permitido para la muestra analizada debió ser menor a 1,1”.
Otro documento analizado por la Veeduría es un estudio contratado por el propio Municipio del cantón, en el que se señala que existen fisuras de gran magnitud en la planta de agua. Esto, pondrían en riesgo a un asentamiento poblacional cercano de estas instalaciones. En ese sentido, se solicitó a la Secretaría de Gestión de Riesgos -uno de cuyos representantes estuvo en la socialización- para que haga una evaluación de esta situación. Funcionarios del Arcsa y Senagua se comprometieron a seguir apoyando las acciones. En tanto, el concejal de Bucay, Ronald Miranda, anunció que mocionará para que el Consejo cantonal conozca en pleno las observaciones y recomendaciones de la Veeduría.
COORDINACIÓN DE COMUNICACIÓN
CONSEJO DE PARTICIPACIÓN CIUDADANA Y CONTROL SOCIAL